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Cómo secar un jamón poco curado

Acabas de adquirir un jamón pero no está lo suficientemente curado, ¿sabes cómo secar un jamón poco curado? En este post te contamos los pasos que debes seguir para hacerlo.

¿Cómo saber si mi jamón está bien curado?

Lo primero que debes hacer antes de empezar a secar tu jamón es comprobar que, verdaderamente, este producto no está bien curado; para ello, lo más recomendable es optar por el proceso de cala.

Cortando un jamón poco curado

Este lo que hace es detectar, mediante el olfato, cualquier defecto que pueda tener la pata. Este procedimiento se lleva a cabo con una herramienta punzante, denominada cala, de unos 12 centímetros de largo.

Esta herramienta se pincha en el jamón, o en la paleta, en tres zonas distintas de forma rápida y breve; si el olor es desagradable esto indicará que el jamón no está en perfectas condiciones y que ha tenido algún fallo en el proceso de curación en la fábrica.

Este proceso debe ser llevado a cabo por especialistas porque si el pinchazo está mal hecho podría provocar que el producto no cicatrice bien y las bacterias lo terminen estropeando.

Por eso, cualquier jamón o paleta lo debes comprar en tiendas de confianza como SuJamón; nosotros solamente trabajamos con casas que garantizan un examen minucioso de las piezas que vamos a vender para que, de esta forma, tu no tengas que preocuparte por nada.

¿Se puede secar un jamón en casa?

Se puede secar, aunque es una tarea compleja y minuciosa. Para poder secar un jamón seco en casa es necesario que, durante la matanza, se extraiga la pieza de la parte trasera del animal; es decir, 5 centímetros por debajo del hueso de la pata.

Además, debes eliminar cualquier resto de grasa, nervios, venas y cartílagos que puedas encontrar próximos al hueso.

Pasos para curar un jamón en casa

¿Quieres saber cómo secar un jamón poco curado en casa? A continuación te mostramos los pasos para hacerlo.

  1. Evita que el jamón se pudra: presiona con la yema de los dedos y con un paño de algodón la superficie de la pata; de esta forma favorecerás la expulsión de la sangre que pueda quedar en las venas y evitarás que la pieza se pudra.
  2. Frota con sal gorda toda la carne: tanto la pata como el hueso.
  3. Ubica el jamón en una superficie plana: tras ello, debes poner, durante 3 días, un peso de unos 20 kilos. Además, la temperatura debe estar entre 12 y 15ºC y debe estar libre de posibles insectos; para ello, lo mejor es tapar el jamón con un pañuelo.
  4. Vuelve a presionar la pata: pasado este tiempo, vuelve a realizar este proceso para eliminar cualquier resto de sangre posible.
  5. Vuelve a enterrarlo, completamente, en sal: tras volver a secarlo con un trapo debes introducirlo, en un nuevo proceso de salazón. Este procedimiento ayuda a la deshidratación y conservación de la pieza; además, ayuda a desarrollar su color y aroma. También es importante señalar que lo mejor es que este proceso se realice a una temperatura de entre 0 y 5ºC.
  6. Elimina el exceso de sal: puedes optar por cepillar la pata o por dar unos golpes secos. Eso sí, debes evitar lavar el jamón para que la pieza mantenga toda sus propiedades y no pierda su calidad.
  7. Pon el jamón en un espacio fresco, seco, ventilado y sin insectos: lo más recomendable es ubicar tu pieza en una bodega natural o en un granero. Ahí deberá estar entre 6 y 10 meses y, durante este tiempo, cogerá las propiedades necesarias para que, cuando lo vayas a consumir, el jamón tenga todos sus nutrientes.

Comprobando si un jamón está poco curado

Por otra parte, hay que destacar que no es lo mismo un jamón serrano que uno ibérico; en el primer producto debes incluir una capa de pimentón antes del último paso para evitar que aparezca moho y se estropee.

Para ello, puedes utilizar un colador o un tamiz que te ayude a repartir el producto; eso si, no tienes que preocuparte porque ese pimentón no le dará ningún sabor a tu jamón.

Cuánto tarda en curarse un jamón

Para que el jamón esté perfecto es necesario realizar todo el proceso y, en función del tipo de pieza que vayas a curar, el tiempo es muy variado. Para que te hagas una idea, en aspectos generales, un jamón necesita, al menos, 24 meses de curación; además, en algunos casos, los jamones ibéricos de bellota, este proceso puede durar hasta 36 meses.

También es importante destacar que la mejor época para curar un jamón en una vivienda es a finales de octubre; en ese tiempo es mucho más probable conservar el jamón a la temperatura adecuada.

Por otra parte, si quieres olvidarte de todo este proceso y no quieres tener que preocuparte de nada, solo de disfrutar del sabor del jamón, siempre puedes optar por comprarlo en SuJamón y, desde el primer momento, disfrutar de tu producto.

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